Martes 9 de junio de 2009
A Rajatabla
Monterrey : la corona
Jorge Villegas
Por ser el municipio de Monterrey el asiento de los poderes, de las empresas, de los sindicatos , las universidades y hospitales mayores, suele darse una distorsión en la percepción ciudadana sobre el alcalde regiomontano y el gobernador de Nuevo León : tal pareciera que uno es el gobernador de Monterrey y el otro , el alcalde de Nuevo León.
Aunque el municipio de Monterrey ocupa apenas una porción del territorio estatal, los gobernadores suelen concentrar su obra pública ahí, para competir con ventaja con la imagen del alcalde.
Eso es lo tradicional: esta vez, además , llega a la alcaldía – gane el PAN o gane el PRI - un político importante que solo por mezquindades de su propio partido, no pudo ser candidato a la gubernatura.
Larrazabal o Abel llegarán al palacio municipal con una sed de reivindicación - conste, no le llamamos venganza – y con ganas de lucirse al grado tal que la comunidad comprenda que fue un error el no elegirlos para el cargo mayor.
La competencia entre municipio y estado se dará con hostilidad, si los triunfos se cruzan: si el PAN gana uno de los cargos y el PRI gana el otro.
Pro si un partido se lleva el paquete entero, la lucha entre ambos funcionarios será soterrada pero igual de intensa.
Además , ¿Qué tal si Larrazabal y Guerra se unen después de los comicios para integrar un gobierno municipal de antología para Monterrey? . Conste, no es especulación gratuita.
jvillega@rocketmail.com
