A Rajatabla
Tiempo Perdido
Jorge Villegas
Los primeros seis meses de este año, se disiparon en las oficinas públicas a causa de la campaña electoral. Los funcionarios estaban vigilados por partidos y autoridades electorales . Toda medida de beneficio colectivo era descalificada como acto electorero y populista.
Ya acabaron las campañas y mañana son las elecciones. ¿Se va a reanudar la actividad enervada el lunes próximo? Indudablemente que no, porque se abre de inmediato un período aún más pasivo, el de la transición . el de la entrega- recepción de los diversos cargos.
Y ahí es donde las rutinas del pasado dejaron de tener sentido: el gobernador electo, asume el cargo dentro de tres meses; los alcaldes dentro de cuatro.
Tiempo que se justificaba en un sistema que se movía a base de papel y lápiz. Donde solo para traspasar la Secretaría de finanzas se requerían miles de expedientes revisables a mano.
Los plazos dejaron de tener sentido en tiempo de computadoras, información electrónica y archivos virtuales.
Habría que legislar para retrasar las elecIones o adelantar la transición y así reducir a un mes o mes y medio la transición en gobierno del estado y en los municipios. Para reducir los costos del llamado año político.
Con el calendario actual, nos va a sorprender el rebrote de la Influenza , cambiando de caballo en mitad del río.
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