miércoles, 3 de febrero de 2010

Jueves 4 de febrero de 2010

A Rajatabla
Apuesta por Canales
Jorge Villegas


En el ambiente explosivo que envuelve al panismo de Nuevo León, al que saca la cabeza le llueve metralla, la merezca o no. Y así pueden inhibirse las mejores expectativas del partido.
Mauricio se mantiene en las primeras planas de los medios locales y aún de los nacionales, a punta de censurar a los alcaldes de su mismo partido; y de contradecir las políticas de su Presidente Calderón.
Raúl Gracia, con alma de sicario, destrona a líderes de fracción, impone funcionarios en los municipios y emprende la guerra contra quienes se le resisten .
Sandra Pámanes y Victor Fuentes , intentan mantener el fuego contra los pecados del gobierno pero sospechan que son gente de su mismo partido, quienes bajo cuerda hacen alianza con Rodrigo Medina.
En esa situación ríspida han sorprendido entre fuego cruzado a un panista tan nuevo como los otros jóvenes que claman por un cambio en el partido. Pero tan cargado de abolengo que le cargan las cuentas de sus padres y de los amigos de sus padres.
Es Fernando Canales Stelzer , quien llegó de las filas de los empresarios y exhibe elegancia, inteligencia y bonhomía encomiable en su trato con todos con los amigos y con los adversarios gratuitos.
Por ahora le cargan que solo vive y trabaja para ser alcalde de San Pedro. Puede ser . Pero si libra la doble acechanza de trabajar con Mauricio y negarse al pastoreo de Gracia, ahí hay madera para un nuevo liderazgo político en el estado..
Ω
Jueves 4 de febrero de 2010

Cosas Nuestras
Olvido
Jorge Villegas

¿Vio cómo pasamos ya a segundo plano lo de Haití?.
Igual haremos con los 16 jovencitos masacrados en Ciudad Juárez.
O con los diez jóvenes asesinados de golpe en Torreón.
Nuestra atención está sobre la recuperación del futbolista Cabañas.
Sobre sus posibilidades de ir al Mundial tras un pleito de cantina .
Sufrimos el síndrome de la atención instantánea pero volátil.
Tenemos la avidez de las novedades, la morbidez de lo catastrófico.
A eso se atienen los políticos. A nuestra poderosa capacidad de olvido.
jvillega@rocketmail.com