sábado, 1 de mayo de 2010

Domingo 2 de mayo de 2010

A Rajatabla
Sospecha Justificada
Jorge Villegas

En los palacios suelen rondar los que ofrecen negocios fabulosos de ganar, ganar , aprovechando los tamaños del mercado que constituyen los gobernados.
Vivales hubo que vendió seguros de vida para todos los derechohabientes del ISSSTELEON a precio altísimo. Los auditores encontraron que necesitaba morirse la mitad de la población asegurada para que el instituto justificara el costo.
Otros, acaban de negociar con la Comisión Federal de Electricidad entregar los más de 20 millones de usuarios domésticos para que los incluyan en mecanismos de promoción de ventas de muchos negocios, a cambio de puntos válidos para cubrir el recibo de la luz.
Igual roban millones cargando en las tarjetas de crédito servicios no solicitados como seguros de accidentes, asistencia en el camino y urgencias .
Por todo eso nos asaltan la duda y la malicia ante dos noticias muy positivas que dieron en la semana la alcaldesa de Guadalupe y el alcalde de Apodaca.
Ambos se lucieron anunciando que están colocando alarmas contra robos en todas las escuelas de sus municipios. En realidad están contratando el sistema de alarmas de una empresa y cubrirán los primeros recibos.
Ivonne, además , anunció seguro contra accidentes por 5 mil pesos para cada escolar de Guadalupe: o sea, unas 150 mil pólizas que, así sean muy baratas, suman entre todas una fortuna.
La pregunta es si licitaron ambos servicios. Si hubo transparencia y cero moches en las abultadas operaciones.

Ω
Domingo 2 de mayo de 2010

Cosas Nuestras
Simulación
Jorge Villegas

Duelen pero se explican las muertes de inocentes en tiroteos contra sicarios.
No fue el caso de dos niños asesinados al pasar un retén militar.
El testimonio de los padres, acribillados en su camioneta , no admite ambigüedades.
A uno de los niños lo mataron en brazos de su madre , que huía de las ráfagas.
En la escena del crimen solo estuvieron los inocentes y los soldados que les dispararon.
Pero el procurador militar llegó a una asombrosa y disparatada conclusión.
Los mataron las esquirlas de una granada lanzada por sicarios que nadie vio.
Por no castigar a unos cuantos, la simulación lastima el prestigio del Ejército .
jvillega@rocketmail.com