martes, 2 de marzo de 2010

Miércoles 3 de Marzo de 2010

A Rajatabla
Límites de la Guerra
Jorge Villegas

Ya llegó a tierra de Nuevo León el debate ético sobre los medios y el riesgo de convertirse en aliados involuntarios del terrorismo.
Las granadas que lanzaron contra cuarteles policíacos en el fin de semana , no tenían el objetivo de matar a nadie. Las aventaron maleantes solitarios, la mayoría con el seguro puesto y contra cristaleras y muros.
El objetivo claro es el de sembrar el terror. Paralizar a la policía, amenazar a la autoridad, amedrentar a los ciudadanos.
La difusión excesiva y cargada de emoción de esos atentados ayuda a generar el efecto buscado por los delincuentes: sembrar el terror , multiplicar las trepidaciones hasta estremecer a todos, ahuyentar a los turistas y dislocar la vida económica.
Los corresponsales de guerra dicen que ese costo de la libre información es inevitable y que la información, por dura que sea, es necesaria para los lectores y televidentes.
Es cierto. Pero cabe la cautela de los periodistas al reseñar una verdadera guerra como la que vivimos :no vale entrevistar con los rostros en close up a vecinos de un municipio estrangulado por el narco, como lo es Cadereyta. O apresurarse a informar a qué hospital conducen a las víctimas de atentados.
Recordar que el enemigo no está en tierra lejana. Aquí vive , lee periódicos y ve televisión. Hay que cuidar de no quedar involuntariamente a su servicio.
Ω
Miércoles 3 de marzo de 2010

Cosas Nuestras
Temor
Jorge Villegas

Desde la Revolución, nunca vivieron los mexicanos como ahora , con tanto temor.
En las ciudades asediadas por el crimen organizado, las condiciones son de guerra.
Hay que autoimponerse toque de queda, dejar las joyas en casa.
Es de alto riesgo buscar una medicina o un cajero automático a la medianoche .
Los vecinos ya distinguen con exactitud entre tiros de fusil y granadazos.
Con teléfonos celulares, los civiles fotografían los escombros de esa guerra.
Las docenas de camionetas robadas y destruidas en los enfrentamientos.
Vamos ganando, dice Calderón. A ver quién sobrevive para celebrarlo.
jvillega@rocketmail.com