domingo, 28 de marzo de 2010

Lunes 29 de marzo de 2010

A Rajatabla
CSI , Monterrey
Jorge Villegas

Parecen escenas tomadas del programa televisivo CSI (Criminal Scientific Investigation): hombres enfundados en trajes blancos recogen huellas dactilares, colocan cartelitos junto a cada casquillo encontrado , mientras policías armados custodian el escenario del crimen.
Tenemos cuatro años viendo esa versión regiomontana de investigación criminal científica que emula a la revisión. Pero ahí acaba el simil . No hay un solo caso, en 200 muertes y 200 levantados , en que las evidencias hayan servido para identificar a los asesinos o encontrarlos para castigarlos.
Aún si los homicidios suceden en un entorno de delincuencia organizada y narcotráfico – de jurisdicción federal- , el aparato de justicia estatal debiera concurrir a la solución de los crímenes, porque son estatales, no federales, los hombres de blanco que reunen evidencias inútilmente.
Las anomalíías empiezan enel momento mismo en que las policías locales se enteran del desaguisado : no llegan hasta que alguien les dice que ya no están los delincuentes, que ya pueden bloquear calles porque a nadie van a afectar.
Igual sucede con los bloqueos: llegan tarde y si por accidente aprehenden bloqueadores, en 72 horas hay que liberarlos porque no hay uniformado o ministerial que se atreva a rendir testimonio ante el Ministerio público .
En la versión regiomontana de CSI , la i corresponde a impunidad .
Ω
Lunes 29 de marzo de 2010

Cosas Nuestras
Soluciones
Jorge Villegas


Desespera comprobar las nueve vidas del crimen organizado.
Ante las derrotas, simplemente crece en violencia y ferocidad .
Soldados y marinos le pegan duro , pero se reagrupan y se desquitan.
El error estratégico es tratar de sofocar las llamas y no el origen del incendio.
Medran los criminales porque la adicción domina a la sociedad.
Reclutan sicarios con facilidad porque abundan los jóvenes sin esperanza.
En la sociedad, no en el combate armado, están las soluciones.
Retener en la escuela, crear empleos, combatir las adicciones. Ahí está el remedio.
jvillega@rocketmail.com