A Rajatabla
Duelo Disparejo
Jorge Villegas
Vamos a omitir los partidos y los nombres de los candidatos para señalar los defectos y vicios del sistema político, a partir de un solo ejemplo de las vida real, sin que parezca acto de proselitismo u opinión sesgada.
Uno de los candidatos que hoy busca los votos ciudadanos ,en uno de los distritos federales, es una persona ejemplar: buen estudiante, con dos maestrías en el extranjero. Es ejecutivo de una importante empresa trasnacional y su trabajo profesional lo ha familiarizado con los mecanismos legislativos.
Su adversario, muestra un kárdex académico plagado de materias aprobadas en segunda oportunidad. Se graduó, como muchos, más por la generosidad de la universidad que por méritos excepcionales.¿Su antecedente laboral? Haber sido el director de alcoholes de un municipio estigmatizado por su corrupción e infiltración del narco .
¿A quien supone usted que favorecieron las encuestas a lo largo de todo el proceso? Pues al segundo, al menos calificado .
Cruce los partidos y los nombres y verá que la experiencia se repite en alcaldías, diputaciones locales y federales. Tal parece que el sistema electoral opera contra el sentido común: privilegia a los peores, con tal de que tengan dinero para repartir favores y comprar voluntades .
El reproche es a los partidos, que descuidan sus procesos internos. Que no les colocan salvaguardas para evitar a los rufianes .
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