martes, 5 de enero de 2010

Miercoles 6 de enero de 2010

A Rajatabla
Larrazabal , el Mandón
Jorge Villegas

Lo dice un militante que solía renegar de la rancia cúpula que controlaba al PAN desde el municipio de San Pedro: el partido , dice , está secuestrado por Fernando Larrazabal Bretón .
Denuncia la maniobre del nuevo año para sacar del Congreso local a la dirigente formal del PAN, a Sandra Pámanes ;y destronar como lider de la fracción a Victor Fuentes.
No hubo juicio político contra ellos, investigación alguna: simplemente se salieron del carril y desacataron la consigna dictada por el alcalde Larrazabal para aprobar el aumento de tarifas de los parquímetros.
Fernando ni siquiera se tomó el trabajo de ir al partido a acusar la deslealtad: mandó a sus escuderos: Raúl Gracia y Juan Carlos Ruiz a notificarles su extrañamiento.
A Sandra, inclusive, le advirtieron que puede ser sustituida por Zeferino Salgado, miembro prominente del Grupo San Nicolás que hoy domina en el PAN.
El ímpetu y la influencia de Larrazabal sobre su partido fue creciendo desde su paso por la alcaldía de San Nicolás. Pero aparecía como el valiente impugnador de una cúpula arcáica y excluyente que detentó el poder interno por decenios.
La negativa del PAN nacional a postularlo c0mo candidato a la gubernatura inflamó el espíritu de los nicolaitas, que hicieron campaña aparte por la alcaldía de Monterrey y se apoderaron de los mandos del partido , grac ias a la nómina inflada de sus miembros.

Ω
Miercoles 6 de enero de 2010

Cosas Nuestras
Revolución
Jorge Villegas

Ya pasaron cien años desde la última revolución sufrida por México.
Nos costó un desorden de más de diez años y un millón de muertos.
Se desquició la economía y se trastornaron las instituciones.
México resurgió así con nuevo entusiasmo y fibra para un siglo difícil.
Pero las instituciones del Siglo 20 están rebasadas y la Constitución se rezagó.
Sin embargo, nos estremecemos cuando alguien habla de otra revolución.
Las definiciones sólo coinciden en que Revolución es un cambio rápido y profundo.
Sin armas, sn muertos, sí que podemos hacer una revolución rápida y profunda.
jvillega@rocketmail.com